Después de que haya redactado todo el post y se me haya borrado, empiezo de nuevo.
Primer día de curro: balance 10/10. En ciertos momentos me he sentido como en una película (en V.O., claro). Ambiente internacional: españoles, italianas, danesa, japonés y otro que me queda por conocer. ¡Demasiado simpáticos y agradables! Creo que tendré que limitar mi tendencia a la ironía y al humor negro... Conexión con todxs desde el principio. Paridad: cuatro mujeres y cuatro hombres (Loreto, ¡estarás orgullosa!). Oficina impoluta: todo nuevo, con amplio ventanal que ofrece luz natural, cómodas sillas para trabajar y buenos ordenadores. Céntrica. Sigo sin creérmelo...
Comida de bienvenida. ¡Qué tierno!
Vamos al tomate, que es lo que os interesa. ¿En qué consiste el trabajo? La mayoría ya sabéis que se trata de una empresa japonesa que está desarrollando un filtro de protección para la infancia en Internet. El director de la compañía es el que curra conmigo en Windsor. Sí, tengo al jefazo de la multinacional a unos metros. Siguiendo la cláusula de confidencialidad, no seré yo quien largue por esa boquita más de la cuenta...
No obstante, puedo decir que tras la introducción a la forma de catolagar para crear la base de datos, nos hemos metido sin preámbulos en lo duro. Sí, amigxs, lo que todxs estábais esperando. Desde el primer día, hemos empezado por lo más obvio: PORNOGRAFÍA.
Algunos pensarán que es el mejor trabajo del mundo, que te paguen por ver porno. Pero creédme, hay imágenes que la retina no debería fijar ni un segundo. Ver abuelas penetradas por rabos enormes o adolescentes en poses obscenas, no me excita lo más mínimo. El reto intelectual está en catalogar las páginas que no son tan evidentes... Desde webs de naturistas (¿ese tipo de desnudos se puede considerar pornografía?) hasta sitios para conocer gente o chatear, que a pesar de no ser explícitos, encierran contenido para adultos.
En cualquier caso, catalogaremos todo tipo de webs. Mañana toca aprender sobre "juegos on line", casinos, etc.
Búsqueda de casa: Sigo la búsqueda estresante de un hogar en el que instalarme. Encima mi couchsurfer me avisa de que un amigo suyo necesita ir a la casa. Me siento mal porque no quiero abusar. Concierto otra nueva visita esta tarde, a la salida del curro. Pues bien... ¡Quedo fascinada con la casa!
Flechazo. Mía, mía, mía... ¡Que esta vez no me la quiten! Es enorme. Una familia inglesa adorable, con un par de hijos de 11 años. Y otro inquilino que apenas está. Precio razonable. Materiales de calidad. ¡Sí quiero, me caso contigo! Reservada. Mañana mismo me mudo allí. ¿Pegas? Está a media hora caminando del curro, pero es ejercicio y me ahorro el gimnasio. Además me alquilan una bici. Y en Windsor parece muy fácil usarla.
¿Se entiende ahora mi éxtasis?
Mi gozo en un pozo! Esto suena muuuuy bien y yo quiero verloooooo
ResponderEliminar:)
Lo verás pronto, sin duda ;)
ResponderEliminar¡Suena genial, Marina! La verdad que estaba muy tranquila que tengo fe extrema en el karma... ergo solo te podían pasar cosas buenas :) ¡Ay! Un besote
ResponderEliminarYa que en la fiesta del bigote me parezco al de Me llamo Earl, pues eso, que el karma me está devolviendo lo que me merecía ;)
ResponderEliminarJijiji, qué ilusión! Acabo de volver de un finde en Bélgica a amsterdam y, recuperado internet, me meto corriendo en tu blog ;)
ResponderEliminara mí también me hace ilusión recibir tus comentarios! como ves, eres VIP, te menciono y todo. Gracias por seguirme! Espero que haya ido genial el viaje. Hablamos pronto por skype. Un apretón de manos :P
ResponderEliminar