Una mirada positiva

Detalles que valoro de mi estancia en Windsor:

 

 (Foto de la ventana de mi baño).

- Disponer de un baño grande y luminoso para mí sola. Mejor que el de muchos hoteles.
- Vivir con dos gemelos y que uno me pregunte todas las mañanas qué tal he dormido (claro, por eso tengo un preferido).
- Que una perrita me salude muy alegre cada vez que me ve.
- Utilizar una cocina enorme y decorada con buen gusto. Nunca mejor dicho, ¡cocinar es un gusto!
- Disfrutar del sonido 5.1, es decir, cinco altavoces repartidos en el salón de forma envolvente, como  en una sala de cine.
- Distraerme al hacer la compra con la cantidad de productos diferentes o con lo bien presentados que están los postres. Dulce tentación...
- Tener a mi disposición una colección enorme de DVDs.
- Hasta ahora, poder comer en la mesa del jardín cuando hace sol o saltar en la cama elástica.
- Que haya una foto de Marlon Brando en El Padrino encima de un inodoro.
- Que me presten gratis una bicicleta de chica.
- Ir en bici al trabajo y sentirme como un anfibio: cuando quiero soy peatón o vehículo; por acera o carretera.
- Que haya un aparcamiento para bicis junto a la puerta del trabajo.
- Encontrarme con muchxs ciclistas como algo natural, incluso trajeados.
- Cruzarme con las madres y padres llevando a sus hijos al colegio de todas las maneras posibles: andando, en patinete, en bici...
- Tener compañerxs en el trabajo de distintas nacionalidades.
- Que siempre haya dulces para compartir en la oficina. Y a veces, caseros.
- Encontrar tiempo para ir a dibujar dos veces en semana. ¡He empezado a experimentar con las acuarelas!
- Descubrir chorradas en Internet durante el trabajo y compartirlas en el blog.
- La naturaleza. No me importa tanto que llueva como en la ciudad, aquí huele a campo.
- Que el centro artístico y cultural de Windsor tenga un bar muy chulo y haya un montón de actividades interesantes.
- Haber dado con unas clases de burlesque justo en el momento de mi vida en el que lo necesitaba.
- Las Charity Shops, o cómo dejarme el salario en ropa chulísima y barata de segunda mano.
- Cobrar a final de mes, aunque no sea mucho. Agradable y nueva sensación.
- Beber Appletiser o Pims, bebidas típicas inglesas.
- Asomarme a un paisaje muy pintoresco y bucólico sobre el río.
- Haber tenido ya varias visitas.
- Poder ir a Londres el finde semana, aunque hasta ahora, como hacía buen tiempo, me he quedado en Windsor tomando el sol.
- Tener desde octubre de compañero en la oficina a un antiguo amigo, pues compartimos todos los enlaces chorras y absurdos que encontramos catalogando.
- Desarrollar mi sentido del humor ante el tipo de webs que veo a diario.
- Que Windsor sea como un pueblo y así me encuentre con gente conocida y nos vayamos a tomar un café de forma espontánea.

¡Y espero que haya un largo etcétera!